El 12 de Julio de 2016, como parte de las actividades de IPTEI para médicos, se realizó un living de infectología con el tema:

Tratamiento actual de la Hepatitis C. Es lo mismo con y sin coinfección con VIH?

Para esta charla contamos con la presencia de la Dra. Nora Cejas, medica del servicio de hepatología del Hospital Argerich y la Dra. Margarita Anders, medica del servicio de hepatología del Hospital Alemán.

La charla se realizó en concordancia con el 28 de Julio en el que se celebra el día mundial de las Hepatitis Virales.

A continuación se publica información para el paciente y un resumen para médicos de los tópicos más importantes que se trataron.

En los últimos años, el advenimiento del TARGA – tratamiento antiretroviral de gran actividad – de su traducción en inglés HAART, ha cambiado radicalmente el pronóstico y la calidad de vida de los pacientes con serología positiva para el virus del VIH.

Sin embargo, este grupo de pacientes se enfrenta hoy a una alta morbilimortalidad de causa hepática.

Esto se debe fundamentalmente a la coinfección con el virus de la hepatitis C, que puede alcanzar entre el 5 y el 30%, acorde a la población VIH analizada. De hecho hasta el año 2015, las opciones de tratamientos especificas para la hepatitis, brindaban resultados sub óptimos expresados a través de la baja respuesta viral sostenida (curación) y la alta tasa de eventos adversos.

Afortunadamente con el advenimiento de nuevas drogas antivirales específicas, el tratamiento de la hepatitis C ha sido radicalmente revolucionado en el mundo.

Desde el año 2015 las drogas llamadas antivirales directos de segunda generación específicas para hepatitis C, se encuentran disponibles en nuestro país.

Son drogas que ofrecen una alta chance de curación (superior al 90% de los casos) independientemente de la preexistencia o no de un tratamiento previo fallido con los antiguos tratamientos. La evidencia científica, sustenta además la misma probabilidad de curación en un coinfectado con VIH versus un paciente sin VIH.

Sin embargo, se debe tener en cuenta que existen numerosas interacciones farmacológicas, no solo con el HAART, sino también con otras medicaciones administradas en simultáneo, es por esto que el tratamiento anti-hepatitis C debe ser cuidadosamente indicado y controlado estrictamente por un equipo constituido por hepatólogos, infectólogos y clínicos.

El buen manejo de las interacciones permitirá al paciente tener una muy buena tolerancia al tratamiento, con bajas expectativas de fracasar.

Otro de los beneficios es que son tratamientos cortos, con drogas administradas por vía oral, superando las desventajas de los tratamientos antiguos (inyectables y de larga duración).

Debido al alto costo económico de estas drogas, existe actualmente un plan nacional del Ministerio de Salud de la Nación, que permite acceder al tratamiento anti-hepatitis C a todos aquellos pacientes, que con o sin obra social, tengan un estadío de fibrosis 2 para coinfectados o un estadío de fibrosis 3 para monoinfectados.

Finalmente, es muy interesante destacar que se encuentran en diferentes fases de investigación nuevas drogas que seguramente mejorarán aún más el rendimiento del tratamiento de la hepatitis C en los próximos años.